El sector editorial multiplica las propuestas para superar la crisis del Covid-19

En una muestra más de la capacidad de reinvención del sector cultural, están proliferando las iniciativas desde distintos agentes del libro para superar el cierre temporal de las librerías

Como ya es sabido, la crisis sanitaria y social que está causando en todo el mundo el Covid-19 tiene repercusiones dolorosas e inmediatas, y otras que se dejarán sentir en los próximos meses. Más allá de la urgencia de salud, que es prioritaria y todos los gobiernos del mundo están gestionando desde distintas perspectivas, uno de los sectores que más sufre con el confinamiento y las medidas de restricción de la circulación es el de la cultura, por su fuerte carácter presencial. Desde teatros a salas de conciertos, cines y festivales, y por supuesto librerías, se trata de uno de los elementos más frágiles de la cadena cultural, y a la vez los contenidos culturales son los más buscados para sobrellevar el confinamiento.

En concreto, las librerías cerradas han sufrido una caída de facturación muy grave, pero ya hay numerosas iniciativas que buscan compensar este parón en la salida de novedades.

• Librería Sendak de Barcelona: venta de cupones, con los que más adelante los clientes podrán adquirir libros.
• Librería Nollegiu de Barcelona: modalidad autorregalo, mediante el cual se reciben durante dos meses libros «sorpresa» seleccionados por el librero en base a las preferencias del cliente.
• La Central: ventas, reservas y servicios mínimos
• Llibreries Obertes, una iniciativa de Grup ARA para centralizar la venta de las librerías que no tengan página web activa para la venta.
• Libelista.cat, la página de compra centralizada de librerías catalanas.
• Todostuslibros.com, la página de compra centralizada de las librerías agremiadas a CEGAL
• Paraseguirleyendo, iniciativa de las librerías madrileñas para centralizar la compra y posterior entrega de los ejemplares reservados, después del confinamiento

Adicionalmente, aparte de las propuestas de las librerías, algunas editoriales también han modificado su pasarela de compra en sus páginas para asignar el porcentaje destinado a la librería de preferencia del cliente de la compra del libro. Son Nórdica Editorial, Raig Verd (que ya lo practicaba en su sistema de suscripción) y la última en sumarse en Penguin Random House, que garantiza la entrega a domicilio del pedido realizado en su página y con especificación de a qué librería atribuir la compra.

Y por supuesto, toda librería con página web de venta activa puede tomar nota del pedido del cliente y reservar el libro, para entregárselo a domicilio o para su recogida a la vuelta del confinamiento. Cualquiera de estas opciones, y de las que vayan surgiendo, será bueno para paliar la falta de facturación durante los dos meses más activos del año (exceptuando la campaña de Navidad), como son marzo y abril. Los próximos meses nos dirán con exactitud cuál es la magnitud del impacto económico en el sector, pero sin duda el sector cultural emergerá de una manera u otra, bien sea con mayor diversidad de formatos o con una estacionalidad de ventas distinta, para consolidarse nuevamente como uno de los sectores de mayor facturación de la economía española, con cerca de 2.500 millones de EUR solo en España.